1. El análisis
Analizar las necesidades de aislamiento de la vivienda, a partir de su ubicación y características.
Analizamos aspectos tales como la temperatura exterior en las diferentes estaciones, si mira a sur- norte, si es una casa a 4 vientos o tiene alguna otra vivienda encima o al lado, ...
También analizamos los sistemas y la calidad del aislamiento actual (como son las paredes, como cierran las ventanas, como nos aislamos o como favorecemos el sol o las corrientes de aire). Podemos medir fugas de frío o calor para detectar puntos de actuación prioritarios. Y muy importante: hablamos con las personas que ocupan la vivienda para entender cómo se sienten ellas, qué sensaciones tienen los diferentes espacios. A partir de esta fotografía, con toda la información, empezamos a trabajar.
2. Soluciones
El segundo paso es proponer diferentes soluciones para aislar la casa y evitar que pierda frío en verano y calor en invierno. El presupuesto y las prioridades de cada cliente nos ayudarán a identificar las actuaciones más esenciales.
Las soluciones para aislar una casa pueden ser variadas en función de las características de la vivienda, de las necesidades de uso y del presupuesto disponible.
Las soluciones pueden incluir aspectos tales como:
- El tipo de aislamiento de las paredes y/o techos. Podemos usar aislamiento que a la vez nos protejan del frío, del calor o incluso del ruido. Proponemos siempre trabajar con aislamientos ecológicos, reciclados o naturales, como por ejemplo celulosa o fibra de algodón, que además nos ayudarán a construir un espacio mucho más sano, libre de tóxicos.
- Soluciones bioclimáticas utilizadas desde siempre: toldos para evitar el calentamiento en horas de máxima entrada de sol directo, estores enrollables,...
- Las innovadoras tecnologías en domótica nos ayudan a gestionar toldos, ventanas, etc, para que se abran o cierren en función de la climatología exterior, protegiendo o favoreciendo la entrada de frío o calor.
- Los tipos de ventanas, que suelen ser puntos de fuga de frío y calor muy importantes. La elección del material es fundamental, los mejores son la madera y el PVC, cada uno de ellos aporta valores interesantes y su elección dependerá de cada proyecto. También es posible utilizar el aluminio pero nosotros, en general lo desaconsejamos.
- Los cristales son un elemento importante. Si son bajo emisivos, nos permiten mantener la energía del sol por radiación durante más horas dentro de un espacio y por tanto son mucho más eficientes. También nos protegen de las ondas electromagnéticas, por lo que actuamos también sobre un aspecto de salud cada vez más importante. Otra opción son los cristales con control solar.
- Los sistemas de ventilación, son cada vez más necesarios, cuando mejoramos la estanqueidad de un espacio debemos ser muy conscientes de que las ventilaciones por infiltración que existían hasta este momento desaparecen, por lo tanto, es básico ventilar para evitar condensaciones. Podemos hacerlo de manera manual, abrir y cerrar ventanas que ya es útil o con sistemas automatizados, que pueden mejorar calidad del aire interior (aportando bienestar y salud) con el mínimo gasto energético (no perder frio o calor, o perder muy poco). Asimismo, los sistemas de ventilación pueden ser de mucha utilidad para aquellas personas que tengan problemas de alergia o respiratorios, ya que permiten mantener una buena calidad del aire incluyendo los filtros apropiados
3. Implementación
El tercer paso es el de implementar las soluciones. Desde Bioclimateam realizamos y coordinamos toda la ejecución y el trabajo para obtener un resultado perfecto.
El último paso es el más importante para disfrutar de una vivienda bien aislada, con un comportamiento homogéneo en cualquiera de sus zonas -tanto en verano como en invierno- con un consumo mucho más reducido y con una mayor sensación de salud y bienestar.
